Esta es la continuación de “La primera vez que estuvo con otro. Mi experiencia”. Ahora voy a reconstruir la noche según lo que ella me contó y lo que vi en los videos.
No pude dormir más esa noche después de ver los videos entre ellos. Los celos y la excitación se volvieron una mezcla rara dentro de mí y en ese momento no sabía qué pensar ni cómo reaccionar. No puedo decir que estuviese molesto, pero una sensación de susto y nervios me invadía.
Me quedé despierto pensando y cada cierto lapso repasaba los videos. La aceleración de mis latidos hacía contraste con una erección permanente hasta que no quedó más remedio que usar los videos como excusa para masturbarme. Eso me relajó bastante mientras esperaba y cuando se hicieron alrededor de las 9:00 am ella me saludó, pues se estaba despertando.
Al principio fuimos algo fríos. De hecho, su mensaje fue un simple “Hola”. Antes de poder preguntarle cualquier cosa, ella quería saber cómo me sentía, se notaba que estaba preocupada por mí. Entre lo que yo sentía, no estaba arrepentido de lo que había sucedido y era algo que me sorprendía. Por esa razón, fui sereno y traté de hacerla sentir tranquila porque, en realidad, lo que había pasado había sido bajo mi consentimiento y tenía responsabilidad en los hechos.
Esa confianza de pareja fue fundamental porque mientras le expresaba lo que sentía, noté que ella se iba tranquilizando y cuando empezó a contar lo que sucedió, pude percatarme de que ambos lo estábamos disfrutando a pesar de los nervios y las dudas. Ella confesó que le había gustado mucho y que había mucho deseo sexual entre ellos, pero nada más allá de lo sexual. La traté como siempre y eso la hizo sentirse más tranquila y pudo contarme lo que yo quería saber.
Ahora quiero reconstruir lo que sucedió entre ellos en esa primera noche basado en lo que ella me describió. No es un relato fiel al cien por ciento pero se acerca bastante, además, nos apoyamos en los videos que recibí esa noche.
Me dijo que se fueron en el taxi al hotel después de haber tomado algunas cervezas. Los nervios no la dejaron seguir respondiendo pues entre prestarle atención al teléfono y a lo que estaba sucediendo, sentía que iba a estallar en nervios.
Evidentemente sabían a lo que iban y apenas entraron siguieron besándose pero, me contó, ya de una manera mucho más apasionada que en el bar donde estuvieron. Mi esposa tuvo que hacerle mucho sexo oral para ponerlo a punto, eso la decepcionó un poco al inicio porque él no estaba erecto, pero fue algo que se corrigió después.
Después de los besos, ella se arrodilló en el piso para hacerle oral. Después de unos minutos se fueron a la cama y ella siguió chupándoselo mientras él estaba acostado. A él le excito mucho verla abierta y poder tocar en la vagina. Ella dice que ahí fue que se empezó a poner de verdad erecto. Es extraño tener que hablar de él pero debo describir que es un tipo medio alto (como 1,78 de altura), flaco, blanco, pero no un paliducho y con un pene que iba de promedio a grande, diría que unos 16 o 17 cm. Su grosor era normal, era de esos penes cabezones y muy lleno de venas, algo que ella siempre me dijo que le gustaba de él.
Después de unos 10 minutos él estuvo erecto totalmente y ella ya estaba mojada por la excitación que le produjo volver a hacerle sexo oral después de varios años. Aunque estaban listos para empezar la acción, él se dedicó a hacerle oral y ella tuvo un orgasmo acostada después de varios minutos con él entre sus piernas. En ese momento la penetró de frente, él de rodillas sobre la cama y ella boca arriba con sus piernas abiertas. Ella dice que se lo hacía muy rápido pero no era un choque fuerte, sino mucha velocidad, lo que la ayudó a tener otro orgasmo rápidamente y eso la dejó impresionada.
Me contó que después de eso, quiso tomar posición arriba, pero él le dijo que mejor se pusiera en cuatro. Así la penetró más fuerte mientras le daba nalgadas y la tomaba del cabello. Ella recordó que él le preguntó si la podía nalguear más duro y ella, cómo suelen ser las mujeres durante el sexo, le dijo que lo que él quisiera. Esa respuesta le dio mucha confianza a él y le dijo que además la iba a grabar. Ella se lo permitió pero con la condición de que fuera con su teléfono. Se lo desbloqueó y él empezó a grabar videos cortos y esporádicos mientras lo hacían, como ese en la posición de perrito, que fue el primero (uno de los videos que me envió). En ese momento me alivié de no haberle escrito más porque quizás hubiese enviado un mensaje que él vería o algo así. Pero ese no es el tema.
Luego, se sentó en el borde de la cama y ella se arrodilló al frente de él y se lo siguió chupando, al final, él se masturbó frente a ella hasta que acabó en su cara (otro de los videos).
Se acostaron a hablar y a descansar y después de unos minutos volvieron a la acción. Él le pidió de nuevo su teléfono y fue cuando se montó en su cara y le puso su pene en la boca. Se lo metió profundamente hasta tocar su garganta y hasta le tapó la nariz en ocasiones. Ella hasta tosió y se ahogó en varias ocasiones y fue ahí que él tomó el teléfono y la grabó mientras le hacía el oral con el rímel corrido y lágrimas en los ojos. (Otro video)
Le subió las piernas en sus hombros y se lo hizo bastante duro. Ella volvió a acabar en esa posición en la que le entraba muy profundo. Me gustó que recordara los orgasmos que tuvo. Luego, ella se montó sobre él, primero de frente mientras él apretaba sus senos y ella cabalgaba y se veían a los ojos intensamente. Después, se puso de espaldas encima de él y él abría sus nalgas, se las arañaba y le daba palmadas fuertes. Él se volvió a sentar en el borde de la cama y ella a su lado se puso en cuatro sobre la misma para hacerle más oral. Allí fue que él puso a grabar el teléfono desde una mesa del cuarto de hotel para que se vieran ambos en la toma y le metía dedos mientras ella estaba dándole una mamada. Ella se subió sobre él y lo cabalgó de nuevo mientras él estaba sentado. Finalmente, él se levantó y se lo hizo mientras la tenía cargada y tomada por las nalgas y así ella tuvo otro orgasmo. Allí fue donde él la bajó porque estaba listo para acabar y le depositó su semen en la boca (otro de los videos que pude ver).
En ese momento ya eran cerca de las 3:30 am. Duraron alrededor de 40 minutos en cada una de las veces que lo hicieron. Ella fue al baño y me envió los videos a mi teléfono y regresó para dormir.
En la mañana se despertaron temprano y ella debía irse porque le había dicho a su papá y a su hermano, con quienes se estaba quedando, que había quedado con unas amigas que vivían ahí en Argentina. Ella despertó primero y se metió en sus sábanas y le empezó a hacer una mamada mañanera con la que él acabó después de unos minutos. Se metieron a bañar juntos y él se lo hizo en la ducha un rato, ambos de pie, pero ella de espaldas recostada de la pared. Sin embargo, ella acabó en una ocasión y él no logró acabar. Así que terminaron, se arreglaron y se fueron.
Cuando llegó a casa de su padre volvió a dormir un rato y al despertar fue que hablamos y me contó los detalles. Debo decir que me gustó bastante saber todo.
Le pregunté si estaban hablando o algo. Le dije que si me podía enviar captures. Me excitó leer esas cosas. Ella, curiosa, le preguntó por qué le costó tanto ponerse erecto. Él le dijo que en él era normal, que siempre necesitaba una buena mamada para ponerse duro.
Hablaban sobre sus detalles, de cuánto les gustó todo y de cuando se volverían a ver. Le dijo que le faltó hacerle cosas, pero que poco a poco ganarían confianza. Vaya que sí.
En ese viaje ellos pasaron dos noches más juntos que relataré. Los siguientes días ellos siguieron hablando, se compartían videos y fotos. Yo estaba bien con eso y me gustaba saber lo que seguían conversando y cómo organizaban sus siguientes salidas de ese mes.