Mi esposa siempre me lleva el sí en las fantasías verbales, pero cuando me pongo serio y le digo que me gustaría verla masturbando o dando sexo oral a otra verga, ella dice que no sabría si podría.
Mi esposa es una mujer tranquila, pero por dentro muy ardiente, sus historias antes de conocerme y que me ha contado son muy hot.
Volviendo a la propuesta y a la que ella me dijo que no sabría si podría, me dejó pensando en hacer una maldad controlada.
Le propuse una vez que saliera del trabajo ir a comer algo y beber y terminar en un motel.
"Guau, que buen panorama me espera -me dijo- llevaré otra teñida al trabajo y de ahí nos vamos”.
Mi esposa cuyo nombre es Celeste, con lo que se ponga se ve bella, tiene unos pechos medianos a grande y bien tonificados, unos glúteos tonificados y de tamaño espectacular, la verdad está bien buena y como dije es muy ardiente.
Al salir del trabajo se puso unos jeans bien apretados, botas y una blusa corta y ajustada a ti cuerpo, sus pechos se marcaban mucho, yo la espere a una cuadra de su trabajo solo con el fin de ver las miradas de los hombres sobre ella, uno la abordó y le preguntó algo, ella le sonrió y le contesto. Él quiso seguir, pero ella volvió a caminar.
Yo: te ves muy bella amor
Celeste: gracias amor, ya me lo dijeron
Yo: Mich, quién, el que te paró cuando saliste del trabajo?
Celeste: Si -me dijo- gracias por alegrarme la tarde, tienes un bonito cuerpo, disculpa lo franco, yo le dije gracias y tú me alegraste la ida con mi esposo a cenar y bailar.
Yo: jajaja qué mala eres el pobre apuesto a que buscaría el local donde te llevo para verte de nuevo.
Celeste: Él lo puede hacer, pero hoy soy todita tuya, el podrá ver y sufrir.
Gracias amor, pensé me has ayudado con mí maldad, buscaría a alguien con ese físico en el local para cumplir mí maldad.
Llegamos al local, cenamos, bailamos y cuando estaba por empezar el karaoke, mi esposa me dice que quiere ir al baño y luego quería cantar.
El verla caminar hacia el baño y ver todas esas miradas sobre ella, hizo que las ganas de la maldad crecieran.
Grande fue mi sorpresa el verla detenerse al terminó de la barra y saludar de un beso a un hombre, alto tonificado, ella lo saludo le sonrió y al parecer por la seña le habrá dicho que estaba conmigo porque apunto en mi dirección, el tipo miró y ella siguió al baño, no sin antes darle otro beso y caminar despacio y notar que el tipo se la devoraba con la vista, ella se dio cuenta de eso y se sonrió más.
Me dio un no sé qué en la guata ver a mi esposa coquetearle a un desconocido o para mí lo era.
Fui a su encuentro, porque el tipo seguía ahí, en el camino del baño.
Ella salió, y el tipo iba en su encuentro, sorpresa para mí ver que el tipo, pasa por el lado de ella, le toma de la muñeca y le dice algo, ella lo detiene y se empina para acercar su oído a su boca, y él le vuelve a decir algo y me fijo que apoyó su mano en el culo de mí mujer, ella no hizo nada, fueron uno o dos segundos y cada uno siguió su camino, me quedé con el movimiento de cabeza de mí esposa de forma negativa.
Yo: Todo bien amor?
Celeste: ufff!! Todo muy bien
Yo; cómo así?
Celeste: Es el mismo tipo que me habló a la salida de mí trabajo, y ahora fue directo y me dijo que si quería ir con él a su departamento.
Yo: a mira tú, y lo conoces?
Celeste: no amor lo vi por primera vez en la salida del trabajo y ahora
Yo: ahh y ya lo saludas de beso?
Celeste: tranki, solo es correcta por su piropo de la tarde
Yo: pero tú le dijiste que andabas conmigo?
Celeste: Si, y así igual me invitó
Yo: usted quiere ir?
Celeste: amor, yo vine contigo y me iré contigo, no se preocupe, solo es rico sentir que uno puede provocar eso en un desconocido, tiene buena pinta pero ya fue.
Amor, pensé yo mientras seguía camino al baño, me la estás haciendo muy fácil.
Entré al baño y crucé miradas con el tipo, me saludó y me dijo “lo felicito”.
Yo: me imagino que esa felicitación es por mí esposa?
Felipe: bueno ante todo mi nombre es Felipe, y si, la felicitación es por tu bella esposa.
Yo: Hola Felipe, soy Jaime, que directo eres y se agradece, te apuesto que tu mano derecha no te la lavas más?
Felipe: Créeme que fue algo que se dio natural, cuando sentí que ella me tomaba mí antebrazo y se acercaba para volver a escuchar lo que le dije, mi mano se fue directo ahí.
Yo: Tranki, mi esposa no me dijo nada de eso, y eso quiere decir que no le molestó, o que me haya contado de tu invitación con una sonrisa, es porque te encontró puntos y sobre todo por el piropo de la tarde.
Felipe: uff, que sangre fría, yo no podría
Yo: Mira a tu departamento la invitaste para tener sexo con ella o no?
Felipe: Si, Jaime, pero como es casada ahí queda todo.
Yo: de aquí nos vamos a un motel, está es la dirección, y este es mi número, dame el tuyo
Felipe: yaaa y para que?
Yo: quiero hacerle una maldad a mí mujer y te invito a participar, cuando ya estemos ahí te digo que habitación y cuando debes entrar. La invitación que te hago es para ver mi esposa desnuda, ella estará con los ojos vendados.
Felipe: y esa es la maldad?
Yo: no, cuando ella me este chupando mí verga, me saldré y tu podrás meter tu verga en su boca… aceptas?
Felipe: Obvio que si… y así se acaba la maldad?
Yo: si ella dice… ahora amor tu boca en mí vagina… podrás seguir y lo que venga después de eso, va a depender de ti… si logras que ella te diga "métemelo"… yo seré un mero observador y tu podrás darte el gusto de follarte a mí esposa… sigues interesado?
Felipe: con respeto, me voy a comer a tu esposa por todos lados.
Continuará…