Les vengo a contar con gran alegría que me he cogido a mi suegra hace un par de días.
Todo comenzó un día que estábamos en el casa de mi suegra, todos habíamos salido de casa, cuando regresamos el papá de mi novia quería salir con sus hijos, por lo cual le dije que fuera y que yo le esperaba ahí en casa de su mamá, con el perro.
A lo que dijo que estaba bien, que esperaba no tardar mucho, entonces me quedé ahí en la casa, yo estaba solo con el perro, pero luego escucho a alguien que va entrando a casa, pues era mi suegra, ella llegó antes de lo esperado.
Ella dijo… ¿Dónde están todos?
Yo: Se fueron el su papá, dijeron que no iban a tardar mucho, así que le dije a su hija que la esperaba aquí.
Suegra: Bueno… ¿Ya comiste?
Yo: Si, no se preocupe ¿Cómo le fue?
Suegra: Me fue bien, nada interesante y ¿Cómo te trata mi hija?
Yo: Bien, no puedo quejarme, es una gran persona, usted le enseñó bien.
Suegra: Jajajaja, que bueno y ¿Qué tal el sexo?
Esa pregunta me sorprendió pues ella y yo casi no hablábamos nunca, pero pues no podría dejarla sin respuesta.
Yo: Es muy buena, la verdad, siempre disfrutamos hacerlo.
Suegra: ¿Si lo hace rico?
Yo: Por supuesto que sí, supongo que también lo aprendió de usted (Yo hablando en todo de burla).
Suegra: Pues me gustaría que me dijeras si ella lo hace mejor que yo.
Yo estaba tan caliente por escucharla hablar y decir esas cosas, mi verga ya estaba muy dura y bien parada, yo solo quería metérsela hasta la garganta.
Yo: ¿Que está diciendo? claro que usted lo ha de hacer bastante bien. (No por eso es la putita favorita de todos, pensaba yo).
Suegra: ¿Qué te parece si nos conocemos más?
Me dijo mientras estaba parada frente a mi acariciando mi bulto.
Suegra: Que rica esta, gruesa y dura, ya veo por qué mi hija está contigo.
Yo: Cómo cree ¿De verdad le gusta? si le gusta tráguesela toda hasta la garganta.
Ella se hincó frente a mi, me bajo el pantalón cómo una puta hambrienta de verga, me empezó a masturbar con fuerza, me escupía mucha saliva, toda mi verga estaba bastante húmeda y dura.
Suegra: Oooh si, que rica verga tienes, dámela toda, quiero comérmela.
Ella se empezó a tragar toda mi verga, se atragantaba con ella.
Se sentía tan rico, cómo entraba y salía, me miraba con lágrimas en los ojos de tan adentro que llegaba.
Le agarré la cabeza y le empecé a follar la boca.
Yo: ¿Te gusta perrita? cómetela toda, siente como te la tragas.
Mis testículos pegaban en su cara, ella hacia secadas y estaba tan caliente, se sacó las tetas y puso mi verga entre sus tetotas.
Yo: Que ricas tetotas tienes putita, se siente bien rico como me lo haces.
Suegra: ¿Te gustan mis tetas?, ¿Te gusta cómo se siente? (Me escupía más en la verga mientras me masturbaba con sus tetas).
Todo estaba tan húmedo y se sentía tan rico, yo quería venirme en su cara, ya no aguantaba más de tan excitado que estaba.
Yo: Me voy a venir perra ¿Quieres mi leche? ¿Quieres tragártela?
Ella me masturbaba con sus tetas y me chupaba la cabeza de la verga.
Suegra: Aah si, dame tu leche, quiero probar tu leche, dámela toda, mánchame toda, lléname de tu leche, soy tu perra.
Yo: Aaah si, perra, trágatela, trágatela, me vengo me vengo.
Suegra: Vente en mí, dámela toda, vente mi amor.
Yo: Aaah sí, me vengo, me vengo puta.
Suegra: aaah siii dámela.
Y entonces me vine, me vine tanto que le cayó en la boca, en la cara, tenía todas las tetas llenas de mi leche, eso me calentaba tanto que le metí la verga en la boca otra vez y me la follé duro.
Suegra: Aaah si que rico, quiero que me rompas el culo, quiero que me llenes toda otra vez.
Se levantó y se sacó los pantalones dejando ver si hermoso y grande culo, redondo y carnoso culo que tanto deseaba comer.
Hasta aquí está vez, pronto subiré la parte dos, recuerda comentar y cualquiera cosa estoy en el mail para todos, gracias por leer, no se pierdan la parte dos, dónde me cojo a la putita.