Cuando Laura salió de su habitación, aquello que vi me dejó boquiabierto! Tenía puesto una blusa sin manga y con escote de color blanco, y un short color negro de tela fina. Sus senos si que eran grandes que digo grandes… ‘GIGANTES’ pero sus nalgas no se quedaban atrás. Aquel short estaba a punto de reventar por el tamaño de su culo.
Se sento en el sofá y me pregunto que si era muy atrevido lo que traía puesto claro que no le dije y empecé con mi masaje. No lo podía creer, desde atrás podía ver como su brassier muy apenas podía contener semejante par de carnes. Mi miembro empezó a creecer y me empeze a poner muy nervioso, era la primera vez que estaba con una mujer de verdad, las otras veces solo fueron revistas que veía escondido de las monjas y los curas.
Me temblaban las manos y sudaba frío, cada que recorría su hombro cuello y espalda. Termine con la parte de arriba y le pregunté si quería que continuara. Si no te molesta seguirle dando masages a esta vieja gorda me dijo, no para nada aparte, no estas gorda eres una BBW y eso que es me pregunto. Big beautiful women! O sea mujer grande bonita. Hay que cosas dices Jonatan si soy una vieja culona y tetona. Pues a mi me pareces atractiva! Cállate muchacho no sabes lo que dices, soy tu mamá, si pero no de sangre le dije. Aparte me gustan mucho tus enormes tetas y tu gran culo. Bueno y tú porque no tienes novia? Es qué hay algo que no sabes mamá Laura! Que es mi Niño, tengo un pene muy grande. Como que muy grande acaso eres un burro? Pues casi mamá Laura, quieres verlo? Mamá Laura se volteó y sus ojos se llenaron de asombro! Vaya que si es grande mi niño, hace cuando que la tienes así? Desde los 15 años mamá Laura. Mmmm la puedo tocar? Bueno si no te molesta. Laura empezó a tocar ese pene de 20”cm lo apretaba y acariciaba. Mamá Laura hay algo más, qué pasa mi niño! Es que me gustan mucho tus enormes tetas, son muy grandes y eso me excita mucho. Tu lo crees? Bueno entonces toma mi niño. Laura se quitó la blusa y el sostén, sus tetas cayeron casi hasta su hombligo eran dos par de tetas blancas pecosas con una enorme areola rosada y un pequeño pezon.
Me abalancé sobre ellas como un pequeño, sediento de leche. Empecé a chupar a succionar, no me alcanzaban las dos manos para una sola teta. Después fui a su enorme trasero y empecé a masajearlo lo apretaba fuete, la puse en cuatro y la empeze a nalguear. Empeze a ver cómo su nalgas iban cambiando de color, me dijo que quería chuparla! Ok no hay problema le dije, empezó a chupar y trataba de metérsela a la boca. Seguimos así por un buen rato, yo mamando sus tetas y ella tratando de meterse mi pene en la boca. Hasta que me dice que quiere que se la meta. Aquello me excitó aún más, pues estaba a punto de poseer a una madura tetona y culona. Se aseguró de lubricar bien su vagina, pues nunca antes había tenido una verga tan grande dentro de ella. Se puso en cuatro y me pidió que fuera cuidadoso con ella.
Empeze a empujarla poco a poco, pero no quería entrar, de tanto insistír entro… y me dolió mucho. Veía como sus enormes nalgas blancas rebotaban en mi pene. Hicimos todas las posiciones posibles, ella gemía de placer y yo disfrutaba de su cuerpo maduro, no me cansaba de chupar ese par de senos blancos y pecosos. Descargue toda mi leche y ella quedó sadisfecha.
Al día siguiente cuando volví de la universidad, Laura se estaba bañando, y tenía la puerta abierta…
continuará!