Ya lo aclare en el último relato que conté que sobre las cosa que hago y cuento acá, hay algunos que no me creen, pero muchos que si, y por ellos, cuento estas cosas, que como siempre digo no lo quiero o no puedo contar.
Todo empezó ayer a la tarde con Maxi. Algunas cosas conté de él, es un “amigo” con una muy buena pija jeje, y cogemos de vez en cuando, pero hacía mucho que no estaba con él; es más al final del año pasado que yo no estaba de novia varias veces me quede a dormir en su casa, y también me cogió con dos amigos, uno por vez, o sea me hizo dos tríos, ¡y me gustó!
La cosa es que ayer a la tarde, él sabe que estoy de novia, me manda un WS, para ver como andaba y esas boludeces, obvio que yo sabía que atrás de eso venia algo más, hasta que me empezó a decir (lo voy a resumir si no va hacer muy largo), si no quería ir a la noche a su casa, que iba a ir Milagros (yo ya la conocía, es re puta), con un amigo, ¡y los dos amigos de él con los que hicimos los tríos!
No les voy a copiar, como hago siempre la conversación por whatsapp, porque se va hacer muy largo, la cosa es que me decía, que la idea era pasarlo bien, que a lo mejor solo nos juntábamos a tomar algo y nada más, pero conociéndolo a él y a quienes iban a ir, sabia como iba a terminar la noche, y la verdad, la idea me gustaba, y a pesar de que solo me humedecía de pensar que podía tener “fiestita a la noche” lo tuve como tres horas insistiéndome, porque en realidad sabía que iba a tener quilombo con mi novio, pero me importo un carajo, hasta que le dije que está bien, que iba a ir, que me pasar a buscar, pero que no se olvidara que yo estaba de novia (no sé por qué carajo se lo dije).
Ahhh, a mi novio le dije que iba a la casa de una compañera de la facultad que estaba re mal, porque se había separado y nos juntábamos es su casa para acompañarla, le dio por las bolas porque ya habíamos quedado en juntarnos en la casa de un amigo de él varias, parejas, pero si no me creía lo mandaba al carajo jeje.
La cosa es que, a medida que fue pasando el tiempo, más me fue gustando la idea, de solo pensar que se podía armar una especie de “orgia”, me ponía muy caliente, y esa calentura me daba esa adrenalina que no me deja pensar y sabiendo que iba la trolita de Milagros, en ese sentido soy competitiva y en trolita, no me van a ganar (más allá de que me gusta serlo).
Aprovechando que no hacía frío, aunque en esta época, no es lo que debería haberme puesto, me puse igual una mini negra, re corta y justada, sin medias, una blusa y un saquito re corto.
Bueno me pasa a buscar Máximo con el auto de su amigo, que en realidad (yo no entiendo un carajo de autos) era una camioneta chiquita, donde solo se pueden sentar adelante, porque tiene una solo fila de asientos.
Bajo, y me hacen sentar en el medio de los dos, chauuu, cuando me senté la pollerita me quedaba de cinturón. Maxi vive en Olivos, o sea teníamos un rato de viaje, al ratito de subirme a la camioneta, empezó de a poco y haciéndose el boludo a acariciarme las piernas, y yo lo dejaba, como siempre, me calienta eso, y al rato me parte la boca, mientras su amigo (que no sé cómo carajo lo hacía), manejando también me empezó a tocar las piernas, pero la entrepierna casi llegando a mi conchita, y me seguí dejando, me gustaba sentir a los dos, que se calentaban conmigo, aparte no pude evitar, tocarle sobre el jean la pija Máximo, que ya estaba reparada.
Obvio, me estaba portando como una trolita, y más sabiendo ellos que estoy de novia, más les calentaba la situación ¡y a mí también!, así hasta que llegamos a la casa.
Llegamos a la casa de Máximo, y nada, tomamos algo y al toque llego Milagros ¡con su amigo!, habrá pasado una hora, hora y media hablando boludeces y tratando de que todo sea relajado, que para mí siempre es la parte más difícil, digo hasta que se vaya ¡todo a la mierda!
Maxi en un momento, se levanta apaga las luces y deja solo prendida una lámpara, para que me entiendan estábamos sentados en un sofá, Maxi, su amigo y yo en el medio y en el otro milagros ¡con su chico!
Milagros se empieza a besar con su chico, pensé, ahhh, ¡así largamos la cosa! Obvio que no me quedo otra que empezar a besarme con Máximo, pero con esos besos que nos matamos, yo mucho no me quería mover, quería ver que hacía su amigo, y al toque me empieza a acariciar las piernas, primero me pone la mano sobre una de mis rodillas, y de a poco empieza a subirlas sobre mis muslos, hasta que llega a mi entrepierna y yo casi sin darme cuenta abro mis piernas, demostrándole que me gustaba lo que me estaban haciendo.
Lo tenía a Maxi, con su mano debajo de mi blusa, acariciándome la espalda, y desabrochándome el corpiño, a su amigo casi llegando a mi conchita, y eso me ponía muy caliente, ya estaba toda mojada, la miro a Milagros y la PUTA, ¡ya estaba EN TETAS! Chauuu, ya se fue todo a la mierda y ¡a mí no me gusta quedarme atrás!
Yo sola, me empecé a sacar la blusa, quede en tetas, Maxi comiéndomelas, besándomelas, y yo ya gimiendo, mientras su amigo, sobre la bombacha ya había llegado a mi conchita y vio que estaba mojadita, con lo que no tardó mucho en sacarme la bombacha, yo ya entregada a que me llenaran de placer, lo dejaba a Maxi que me besara las tetas, que me las muerda, que me las bese, y totalmente abierta de piernas, poniéndolas sobre los hombros de su amigo. Dejé que con su lengua empiece a jugar con mi conchita.
Solo para ver que hacía Milagros, la miro y estaba solo con su mini tanguita y su chico metiéndole dedos por todos lados, yo seguía gozando, era mucho el placer que me estaban dando hasta que en un momento fue tanto el placer que no pude evitar, agarrarle la cabeza a su amigo, meterla en mi concha y explote en mi primer orgasmo, y siempre después del primero quedo ¡muy caliente!
El amigo de Maxi, me saca la pollera, ya estaba totalmente en bolas, Milagros también ¡y ya se la estaban cogiendo!, el amigo de
Maxi me pregunta: “¿querés que te coja?” que forro obvio que quería, pero él lo quería ¡escuchar!, “si, cógeme , cógeme guacho” (algo así le dije) abro mis piernas, mi conchita ya era un lago y me empieza a coger, mis gemidos, mi cara de placer, sola me tocaba las tetas y Maxi me pone su pija en mi boca, no hay cosa que me guste más que me cojan y tener una pija en la boca, como podía se la chupaba y su amigo me cogía ¡desesperadamente!
Los gemidos de Milagros, y sus gritos cuando estaba acabando fue lo único que me hacía falta para ¡acabar de nuevo!, mientras Máximo, se pajeaba y me lleno la cara y la boca ¡de leche!
Después de eso, Milagros, se viene al sofá donde estaba yo, y me dice que su chico ¡también había acabado!, y me dice, hagámoslos calentar lo más rápido posible, y me da un beso, así, con mi boquita ¡llena de leche!, y nos empezamos a tocar, por todos lados, yo me deje, ella se dejó, nos empezamos a meter los dedos ¡en nuestras conchitas!, y Milagros se entretenía con mis tetas (ahí me di cuenta que es media lesbiana como yo), todo esto mientras los chicos ¡nos miraban!
Terminamos haciendo un 69 y el amigo de Máximo, que todavía no había acabado, me empieza a poner la puntita en la cola (yo estaba arriba). No me hizo la cola, pero eso fue suficiente para que se caliente y me acabe ¡sobre mi cola!, mientras con Milagros, ya nos estábamos matando con nuestras lenguas en las conchitas (yo en la de ella y ella en la mía), yo ya estaba perdida, solo quería gozar, ella también, todo nos importaba un carajo, y más saber que hacíamos eso mientras los chicos nos miraban, más nos calentaba (al menos a mi), hasta que acabamos las dos juntas, acariciándonos las piernas, chupándonos las conchitas.
Yo esto lo cuento rápido, pero haría más de una hora que ya estábamos cogiendo ¡todos!
Después Máximo y el chico de Milagros, directamente nos piden que nos pongamos en el sofá en cuatro, y nos empiezan a coger de nuevo (con lo que habíamos hecho ya estaban calientes de nuevo), y mientras nos cogían, como podíamos con Milagros nos besábamos, otra vez (al menos para mí) el placer total, que me cojan mientras me beso y me toco con una mujer, así estuvimos un rato dejándonos que nos cojan hasta que con Milagros acabamos de nuevo las dos agarradas, y esta vez acabamos ¡como perras!
A esa altura los tres chicos ya estaban otra vez con ganas de acabar, con Milagros nos sentamos en el sofá y nos fuimos repartiendo las pijas, para ir chupando las tres, siiii, nosotras dos chupando tres pijas, hasta que nos empezaran a llenar la cara y la boca de lechita, Maxi, fue el único que acabo directamente en mi boca, me lleno la boquita de leche, me la trague, y se la seguí chupando hasta dejársela ¡totalmente limpita!
Nos vamos con Milagros al baño a lavarnos la cara la boca, una vez limpitas Milagros me parte la boca, ella me hace dar vuelta, me apoyo sobre los azulejos del baño, me mete la mano en mi conchita, enseguida me moje ¡de nuevo!, me mete los dedos y me hace ¡acabar de nuevo!, me dijo que también le gustan las mujeres (como a mí), me dijo de algún día estar juntas las dos solas, pero no sé, ¡quedará para otra vez!
Ahhh, al baño, ya nos habíamos llevado algo de ropa, ya había pasado bastante tiempo cogiendo y la verdad que por ese momento ya no queríamos más, ya estábamos bien cogidas por esa noche.
Vamos al Living, los chicos también, ya estaban medio vestidos, ya era tarde, no se serían las 5 o 6 ¡de la mañana! Maxi, me pregunta si me quería quedar a dormir, no sé, estando de novia me parecía ya muy muy de trola, pero me acordé de las noches que pase con él (cuando no estaba de novia) y como ya estaba jugada le dije que sí.
Se fueron todos, nos acostamos, y obvio empezamos a coger de nuevo, me hace poner en cuatro y empieza jugar en mi cola con mis jugos, con solo tocarme la conchita me empecé a mojar ¡de nuevo!, me pone un dedo, gimo, me pregunta: “¿te gusta?” le digo que si, me lo mete todo y otro más, mi colita ya estaba bien dilatada y me empieza a meter la pija, despacio primero, hasta que se desespera y me la mete como una animal, dolor placer, gemidos gritos, acabe como una perra de nuevo (sin pensar que después de los que nos cogieron iba acabar de nuevo).
Nos quedamos dormidos, a eso de las 9 de la mañana me despierto. No podía llegar muy tarde a casa, pero despertarme con una pija al lado es más fuerte, así que lo desperté, con una linda chupada de pija, obvio al toque se le paro, pero me dice: “¡acá no!”, me lleva a la ducha, y ahí hicimos un mañanero de aquellos, agarrada otra vez sobre los azulejos de la ducha, así de parada, me empieza a meter los dedos enjabonados ¡en la cola!, entraron fácil, y más fácil entro su pija y me dejo ¡temblando!
Me lleva a casa, y nada… mi novio me había llamado varias veces, obvio no lo atendí, ya le había dicho lo que iba a hacer, a la tarde hablamos, me mostró desconfianza, lo mandé al carajo, como siempre le dije que no me ofenda y todas esas cosas, seguro que mañana lo recompenso, como nosotras sabemos hacerlo y se le pasa.