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Tiempo de lectura: 2 minutos

Luego de llevar más de un mes conversando por chat y por Skype hasta la madrugada, decidí viajar a la ciudad donde vivía aquel desconocido a quien conocí por una amiga en común.

Fue extraño pero excitante, sabía que iba a estar en su casa y con seguridad en su cama, el deseo era mutuo. Previo a llegar a su apartamento fuimos a conocer un poco la ciudad y al centro comercial, sin vergüenza en medio de la gente me abrazó por la espalda metiendo sus manos entre mi camisa y mi brassier acariciando mis senos, qué placer! Ya quería estar a solas con él!

En su apartamento, y luego de compartir un par de copas de aquel aperitivo que tenía reservado para una ocasión especial, yo sin brassier porque él quería apreciar mis senos y mis pezones erguidos a través de mi blusa, tendidos en el sofá de la sala, él justo a mi lado casi encima, comenzó a besar mi cuello y a meter su mano izquierda entre mi bluejean, logrando que me excitara más de lo que ya estaba sólo por el hecho de estar solos en su apartamento, su mano izquierda estimulando mi clítoris e introduciéndose en mi vagina, yo mojada y con ganas de que me quitara toda la ropa y me penetrara, sin pensar ni un segundo que nos verían teniendo sexo los del frente a través de la ventana. Le pedí que me llevara a la cama y me quitara todo lo que llevaba puesto, me lanzó a su cama, comenzó a acariciar mi cuerpo, agarraba mis tetas como él las llama, apretándolas fuerte y mordiéndolas, abriendo mis piernas con una de sus manos y penetrándome fuerte, presionaba mi pelvis contra la suya con fuerza para sentirnos más adentro el uno del otro, metía y sacaba su pene en mí sintiéndome cada vez más mojada, quería decirle que bajara y me hiciera el sexo oral que tanto me gusta y me excita pero preferí dejar que fluyera naturalmente esa primera noche, la respiración de los dos se hizo más intensa hasta que su semen terminó dentro de mi vagina sin sentir temor alguno. Ese fue sólo el inicio. Con ganas de que me hiciera todo lo imaginable en el sexo pero esperando a sentir más confianza.

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