back to top
InicioNo ConsentidoEmanuel y los piratas

Emanuel y los piratas
E

el

|

visitas

y

comentarios

Apoya a los autores/as con likes y comentarios. No cuestan nada.
Tiempo de lectura: 5 minutos

Emanuel estaba contento de haber venido a la casita de playa de su familia. Se dispone a parar el fin de semana como a el le gusta, en soledad y disfrutando de la naturaleza. Sus padres declinaron de venir puesto que la temporada de playa ya casi finaliza y no esta caluroso como para ir a la playa que es cuando él mas disfruta. Poder dormir hasta cuando quiere, quedarse en el jardin escuchando musica y ver ponerse el sol entre los pinos que rodean la casa es lo que realmente quiere. Tambien el vecindarioi se ha quedado despoblado, casi todos vienen a pasar en verano y luego vuelven a la ciudad cuando el tiempo empieza a ser menos caluroso.

Solo tiene dos vecinos, Don Beto y Don Lito que viven en la casa de al lado todo el año, ya que tienen un negocio de venta de leña y ademas es su vivienda de todo el año. Emanuel no tiene mucho trato con ellos mas alla de algun saludo porque los dos hombres son mucho mayores que el y no tienen nada en comun. En realidad Emanuel tiene pocas amistades y principalmente se interesa en su apariencia fisica. A sus 18 años le gusta ir al gimnasio 3 veces por semana, lo que acompaña con una dieta sana por lo que tiene un fisico armonico, lo que complace al joven. Ultimamente ademas concurre mensualmente a un centro cosmetico donde se depila todo el cuerpo porque odia la aparicion de vello en su cuerpo. Algunos compañeros de Emanuel se burlan de su cuerpo desprovisto de pelos y le dicen que eso de depilarse es de gays, burlas que no hacen mella en el chico, a el no le interesan los hombres y tampoco tiene interes en las chicas. Principalmente tiene un solo interes, que es su cuerpo y en lucir siempre esplendido, cuando se mira desnudo en el espejo siente gran satisfaccion por lo que ve. El cree que es un poco narcisista su comportamiento, pero no le parece mal.

Aquella tarde de sabado estaba descansando en la reposera en el jardin cuando sintio que alguien lo llamaba, era su vecino Don Beto que lo saludaba y le decia si habia venido a pasar el fin de semana, a lo cual el chico respondio que asi era y que sus padres no habian querido venir. "Asi que estas solo" le dijo Don Beto mientras se aproximaba el otro hombre, Don Lito que tambien lo saludo con la mano. Los dos hombres eran sesentones, Don Beto mas bajo y rechoncho que Don Lito que era mas alto, de piel morena, tenian barba de dias y aspecto poco cuidado, se pasaban todo el tiempo cortando leña y apilandola en el fondo de su vivienda.

Lo que no sabia es que los dos hombres lo miraban con interes, viendolo semidesnudo solo vestido con un corto short, su pecho y piernas desnudas, se veia tentador para estos dos viejos que de a poco se acercaron al jardin de su vecino y Don Beto dijo "Porque no te venis a tomar algo con nosotros, justo ibamos a descansar un poco de cortar leña".

Emanuel no tenia idea de la maldad humana y ademas jamas iba a desconfiar de sus vecinos y para no ser descortes dijo "Bueno, ya voy Don Beto, dejeme que me ponga una remera y voy". Mientras el chico se levantaba y se vestia, ademas de calzarse sus sandalias los dos viejos quedaron cuchicheando en voz baja

"Mira que bueno que esta, dan ganos de cogerlo" dijo Don Beto a lo que Don Lito dijo "Es una mantequita, que piernas tiene, para chuparlo todo"

Los dos hombres ya habian estado bebiendo y estaban algo sacados, ahora al ver a su vecino, con poca ropa y ese cuerpo tan lindo se empezaron a excitar.

El joven traspaso el jardin de su casa hacia el de sus vecinos y de alli lo invitaron a entrar en la casa. Lo primero que percibio Emanuel fue el olor a humedad y poca higiene de esa casa, propio de dos hombres que vivian solos penso. Don Beto le sirvio un vaso casi lleno de una bebida alcoholica muy fuerte que apenas pudo tragar sin toser, lo que provoco la risa de los viejos "Parece que no tenes costumbre de tomar cosas fuertes" dijo Don beto.

Para desmentirlo, el chico tomo otro sorbo mas largo y lo trago como pudo, diciendo, "esta fuerte pero es rico" "Como vos" penso Don Beto que ya lo miraba sin disimular lo que le gustaba ese chico y lo que le gustaria hacerle. Lo invitaron a sentarse en el unico sillon que habia y los dos viejos se sentaron una a cada lado de Emanuel. Los tres brindaron y el muchacho sorbio otro trago, que parecia quemarle la garganta.

"Parece mentira de la ultima vez que te vi como cambiaste, eras un nene y ahora sos un hombre" dijo Don Beto mirandole las piernas.

El muchacho, complacido y sin advertir las malas intenciones, le dijo "Es que me cuido y voy al gimnasio, me gusta estar bien presentable"

El otro viejo le lleno el vaso de nuevo, Emanuel tomo otro sorbo pero al no estar acostumbrado se empezo a sentir primero, mas liviano y bien pero luego se empezo a sentir mareado. "No, no me sirva mas que ya tome mucho" a lo que Don Beto dijo "Un poco mas, no te va a hacer nada" pero veia complacido que el chico a medida que tomaba le costaba hablar. Don Beto decidio arremeter y le puso una mano en el muslo mientras le decia "Mira que lindas piernas tenes, y que suaves las tenes".

Emanuel, que cada vez le costaba mas mantenerse sobrio, dijo "Es que me depilo todo porque me gusta mas que tener pelos, es mas higienico". La mano que tenia en su pierna se empezo a mover por todo su muslo mientras el viejo decia con voz ronca "Y como haces para tener tan lindas piernas, parecen las de una mujer". "Hago muchos ejercicios para las piernas" dijo Emanuel que no supo si le gusto el comentario de que tenia piernas parecidas a una mujer.

Don Lito que hasta el momento se habia limitado a servir alcohol al chico, dejo la botella y se puso a tocarle la otra pierna, ahora Emanuel sentia que sus dos piernas eran intensamente sobadas, pero no pensaba nada raro, eran simplemente dos personas que estaban admirandolo por tener ese cuidado con su cuerpo. a diferencia de ellos que se veia estaban bastante descuidados.

El moreno que sobaba la pierna de arriba abajo, tocandole tambien la pantorrilla y volvia a subir dijo "Mira Beto que duras y suaves tiene las piernas" a lo que Don Beto dijo, sin dejar de tocar la otra pierna "Yo tambien la tengo bien dura"-

Emanuel se dio cuenta que estaba empezando a perder la conciencia y todo giraba alrededor, se quiso levantar y no pudo, Don Beto le dijo "Mira, mejor que te tires un rato en la cama hasta que te repongas" pero el chico escuchaba como que venia de lejos, tenia una borrachera increible y se dejo llevar por los dos calientes viejos hasta la cama del dormitorio.

Casi no sintio cuando lo desnudaron y lo acostaron boca abajo en la cama. Como lobos hambrientos los dos viejos se pusieron a acariciar el cuerpo del chico y cuatro manos lo recorrian sin pausas. Emanuel sintio, en ese estado vaporoso en que se encontraba, que estaba en medio de una pelicula de piratas que habia visto en su niñez. Se trataba de un barco mercante que era abordado por salvajes piratas, barbudos y brutales que se llevaban todo por delante ante indefensos marinos. En realidad lo que estaba siendo abordado en forma salvaje era el culo del chico, Don Beto apretaba y sobaba esas redondas carnes mientras el negro le acariciaba los muslos, los dos con una expresion de lujuria pintada en sus caras.

Ya sin poderse contener, Don Beto hundio su barbuda cara entre las nalgas del chico pasando su rasposa lengua por toda la raja del culo y busco con desesperacion hundirse en el cerrado orificio del muchacho. Emanuel, en su ensoñacion de piratas sintio que mas piratas se sumaban al salvaje abordaje del sufrido mercante marino y sus tripulantes.

Ahora eran dos dedos que se introducian en el culo de Emanuel, dilatandolo y preparandolo para la penetracion, Don Beto tenia una ereccion monumental y tomando al chico de la cintura lo despego del colchon, con una mano lo mantuvo y con la otra busco llevando su duro miembre hacia ese deseado hoyo. Lo encontro y empujo, la punta se intrujo, luego empujo mas y sintio como su verga era atrapada y apretada por ese culo, empujo mas y lo penetro completamente, quedandose un momento quieto para luego empezar un mete y saca violento, lo embestia con fuerza y soltaba bufidos de satisfaccion mientras se lo cogia, viendo como esas redondas nalgas temblaban ante cada embestida. Finalmente, la excitacion pudo mas y eyaculo largamente, quedandose unos instantes sobre él para luego salir y quedar de costado. Sin demoras, Don Lito que estaba esperando por su momento, apenas el culo del chico quedo libre se subio sobre el y le metio su dura verga, su penetracion fue mas facil al estar dilatado y mojado por la leche de su socio. Empezo a cogerse ese culo como loco, su calentura era brutal, despues de ver como Don Beto se lo habia cogido ahora era su turno y lo disfrutaba suspirando de placer hasta que acabo en medio de un bufido brutal.

Despues de un rato los dos abusadores se retiraron del cuarto dejando dormir al chico que tanto placer les habia dado, mientras tanto Emanuel todavia soñaba con barcos piratas y abordajes, horribles caras barbudas y banderas con calaveras, mientras empezaba a sentir un ardor insoportable entre sus nalgas.

Compartir relato
Autor

Comparte y síguenos en redes

Populares

Novedades

Comentarios

DEJA UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Los comentarios que contengan palabras que puedan ofender a otros, serán eliminados automáticamente.
También serán eliminados los comentarios con datos personales: enlaces a páginas o sitios web, correos electrónicos, números de teléfono, WhatsApp, direcciones, etc. Este tipo de datos puede ser utilizado para perjudicar a terceros.