Después de todas las locas confesiones que me habían comentado mis compañeras actuales de la división decidí acercarme a las más zorras y esas eran Gaby y Lizbeth. Después de un tiempo pasábamos las horas nosotros juntos sin aburrirnos e incluso llegamos a salir nosotros tres y saliendo de fiesta les ofrecía mi departamento para dormir ya que no quería que sufrieran algún accidente o algo por el estilo, digamos que me preocupaba por ellas. La confianza era máxima que hasta llegue a conocer a sus familiares. Cierto día, en un aula de clases nos quedamos a platicar y cómo llovía ese día nos quedamos hasta tarde en la universidad, ordenamos comida y ahí en el salón nos pusimos a comer. Les recordaba lo maravilloso que me la había pasado con ellas y que mis días en la división llegaban a su fin pues ya terminaba mi intercambio en esa universidad y obvio ellas lo sabían por eso la convivencia entre nosotros era muy frecuente.
Entre la comida les dije que de no ser mis amigas si las hubiera llegado a contratar como damas de compañía y ellas solo sonrieron y me dijeron “Ay cómo crees, eso de a gratis ahh jajaja” Yo la verdad no quería o más bien no debía porque eran tan grandes amigas que nunca las vi de ese modo aunque se cargaban unos cuerpazos que hasta llegue a pensarlo. Gaby que era la más temeraria me comentó “Si quieres te podemos llevar a un servicio, eso sí, solo te limitarás a ver, cómo a fin de cuentas ya estás por irte en unas semanas no creo que te ubiquen por acá” Yo solo les dije que me explicaran qué tipo de servicios hacían y me dijeron que solo bailaban e incluso si le llegaban al precio podrían llegar a tener sexo. ¿Y yo? Les pregunté, “Tú solo te limitarás a ver, si quieres ir claro” Jajajaja solo me reí pero les dije que no había problema, que me avisaran cuando iban a realizar algún servicio para que las llevara en el coche de Gaby y me presentara como su chofer y listo.
El servicio no se hizo esperar y hasta me enseñaron el mensaje que decía: “Dos edecanes triple A para servicio en casa de ***** 11pm todo pagado” La fecha caía un sábado pero lo extraño es que era el nombre de una señora, yo le pregunté a Lizbeth que si en realidad era una mujer y me dijo que si, tanto hombres como mujeres requieren el servicio y es buena paga. A mí solo se me iluminó mi corazón al saber cómo se frotaban esos dos cuerpos perfectos y les dije que si iría con ellas no sin antes el “Permíteme primero…” de Gaby, “Tendríamos que decirle a la que nos contrató si no hay problema contigo, que solo irás a ver” después de unas llamadas todo había quedado, parece que no había ningún problema y en realidad era una pequeña fiesta donde se habían solicitado a chicas para ambientar el lugar y también irían otras chicas de agencias el detalle era ir vestida como una de ellas pues parecía que el convivio era entre mujeres y eso no me agradaba así que visualicé el panorama, pensé en los pros y contra y les afirmé que si pero si llegaban a descubrirme tendrían que ayudarme a lo cual aceptaron pues era una mujer la que solicitó el servicio y suponíamos no habría mucha exigencia.
Nos fuimos de compras y yo me sentía realizado al estar con esas dos amigas que me cargaba, la vista de los hombres se iban con ellas pues tenían unos hermosos cuerpos y más que eso yo tendría la suerte de verlas desnudas y eso me excitaba demasiado aunque me conformaba con eso. Ellas hicieron sus típicas compras y yo solo le pedí lencería, era obvio que no iba a entrar a comprar eso así que se lo deje a ellas mientras me iba a comer. Una vez hecha las compras nos dirigimos a mi depa para afinar unos cuantos detalles. Aquí venia de nuevo mi martirio de vestirme de mujer pero con tal de ver en qué estaban metidas estas niñas me arriesgaba total, una mujer no creo que sea tan exigente y en caso de descubrirme solo me iría sabiendo que entré por pura curiosidad gracias a ellas. Me dejaron el pequeño vestido ajustado que usaría y la pequeña lencería y nos veríamos en la noche, Gaby paso a dejarme una peluca oscura pero bien cuidada para después maquillarme y afinarnos como mujeres. Todo iba funcionando…
Ellas se veían de lo más deliciosa posible, no veía forma de describirlas, sus atuendos súper ajustados dejaron ver su hermoso trasero duro y bien trabajados en el gym. Yo ya hasta me arrepentía y solo quería ya sea cogérmelas ahí o masturbarme ya me daba igual. Ellas me convencieron ya que habían quedado que iría una acompañante y que con suerte a lo mejor pasaba algo especial y yo sería el observador, eso me mató de curiosidad y nos dirigimos al lugar. Entrando al fraccionamiento nos pidieron el nombre de quién nos había invitado, se lo dimos y nos ubicaron donde sería la posible fiesta o reunión. Seguimos derecho hasta llegar al final de la calle y dimos con el número de casa que decía en el mensaje y al parecer estaba vacía o eso creíamos, tocamos y nos abrió una señora de unos 35 años más o menos, bien cuidada, rubia, de saco y falda ajustada y con un vaso de cristal en mano. Nos saludó a nosotros tres y nos invitó a pasar. Nos dijo “las otras chicas están en el patio, pasen por favor” Nos dirigimos hasta allá y nos encontramos a otras tres chicas de igual o mejor cuerpo que mis amigas pero a estas por ser de color blanca lucían espectacular. Nos acomodamos y tomamos nuestras copas, yo le decía a Gaby que me iba a limitar a hablar, que para que no sospecharan que mejor ellas hablaran por mí a lo cual estuvo de acuerdo. La dueña de la casa nos dijo que en un momento iría con nosotros y que nos divirtiéramos con la música y el alcohol que había en su bar.
Pasaron las horas y Lizbeth y Gaby comenzaron a beber de más o bueno, trataron de seguirle el ritmo a las demás chicas, solo hablaban de temas comunes y una de ellas pregunto si no le habían dicho de que iba a tratar el servicio a lo cual mis amigas se limitaron a decir que no sabían. Andrea la más bonita de ahí comentó: “Parece que nosotras 6 haremos lesbian show o eso parece, el esposo de la dueña bajo antes de que ustedes llegaran y nos dijo que querían vernos desnudas cuando él regresara pero aún no llega” No había problema, se decían unas a otras y continuaron bebiendo y con sus pláticas. Pasando la media noche entran los dueños de la casa y nos comentan: “Diviértanse, nosotros solo estaremos aquí, no se preocupen por nosotros” Bajaron un poco la música y pusieron la luz tenue en el jardín, parecía un paraíso de hermosas chicas ahí pero bueno, seguíamos en lo nuestro hasta que vimos cómo el señor comenzaba a besar a su esposa y poco a poco la iba desvistiendo, las chicas solo lo veían y no decían nada, al parecer viendo esa escena sabían lo que iba a venir así que decidieron servirse más alcohol. En un rato la esposa del señor quedó desnuda con una hermosa tanga azul con detalles. El señor les pidió a las chicas quedarse igual que su esposa y poco a poco fueron desvistiéndose. Yo me quede viendo el hermoso trasero de mis amigas que lucían espectacular y más con sus micros tangas que cargaban tipo así:
El señor me pidió que igual hiciera lo mismo que ellas pero mis amigas le dijeron que siendo nueva solo me limitaba a ver, que aún no entraba en este mundo y solo estaba por curiosidad, las otras chicas hicieron el favor de comentarle lo mismo que por ellas no habría problema pues parecía un poco tímida por no haber hablado toda la noche y funcionó, el señor solo me dijo que buscara un asiento y me fui directo a la parte trasera de la barra. El señor se dirigió a su esposa y se dejó caer toda la ropa, él ya estaba erecto y su esposa solo lo veía a los ojos mientras lo masturbaba. Así estuvo por unos minutos hasta que la esposa le pregunto: “¿Cuál quieres penetrar primero?” -“A ella…” y señaló a Andrea, ella solo sonrió y se acercó al señor para darle un beso y masturbarlo, su esposa quedó sentada en un sillón tocándose sus pechos para después decirle a las que venían con Andrea que se acercaran con ella y así fueron, una de cada lado de modo que la señora quedara en medio mientras ella cerraba sus ojos las otras dos chicas tocaban sus pechos y sus piernas y de igual forma se besaban entre ellas tres. Todo un show. El señor le pidió a Gaby y Lizbeth se acercaran con él para que las besaran y ahí fueron, entre Andrea, Gaby y Lizbeth disfrutaban de aquel suertudo señor hasta que las tres se hincaron y comenzaron a hacerle sexo oral, veía como compartirán ese pedazo de carne mientras una lo metía a la boca las otras dos se besaban y tocaban parte de sus testículos del hombre.
Yo solo veía y como sabía que mi vestido era muy chico y ajustado solo lo levanté un poco para hacer a un lado la tanga y dejar en el aire mi pene para comenzar a frotarlo de todas formas nadie lo iba a notar por estar detrás de la barra. Las chicas con las que estaban la señora ya desnudas comenzaron a practicarle un delicioso oral, la recostaron en el sillón y mientras una la besaba con delicadeza a la señora otra pasaba su lengua entre sus piernas. El señor estaba concentrado en lo que hacía así que jalo del cabello a Andrea, le bajo su tanga rosa y la pego a una mesa y la comenzó a penetrar muy fuerte que la pobre gritó al instante. Gaby y Lizbeth se acercaron al señor y comenzaron a besarlo y tocarlo, él les hizo un comentario que no escuche muy bien pero ellas entendieron. Se acostaron y se enredaron entre piernas simulando una tijera. La escena era memorable viendo a esos dos cuerpos perfecto haciendo eso, tanto que poquito a poquito comencé a gotear mi líquido espeso. Andrea gritaba de las malditas embestidas que le daba el señor hasta que se quitó y le dio una fuerte nalgada para decir: “Vienes tú Lizbeth” ella se levantó y se dirigió al señor no sin antes ponerle saliva al pene, Andrea ocupó su lugar y ahí siguió, mientras ahora la pobre Lizbeth era penetrada por el dueño de la casa Andrea disfrutaba de Gaby besándola. En el otro lado, no tan lejos, solo veía como sonreía la señora que para ser franco tenía un muy buen cuerpo, con las que estaba solo se besaban hasta que sacó un consolador y lo introduzco a una de ellas, mientras ella metía y sacaba el objeto la otra la besaba para disminuir sus quejidos de placer.
No vi en qué momento Gaby estaba siendo penetrada por el señor, tanto que se veía deliciosa en la posición de 4 y con ese hermoso trasero que se carga era una delicia. Todo iba bien hasta que el señor les dijo: “acérquense todas…” Ya sabía que iba a venirse así que todas las que estaban ahí se acercaron y agacharon para esperar el disparo del líquido espeso por el cual estaban ahí, a Gaby la pusieron de frente de forma que a ella la iba a terminar rociando completamente. En eso la esposa se acerca para masturbar a su esposo y ¡Listo! Termino acabando tanto que parecía que salía más y más, a todas les tocó un poco de semen en su cuerpo pero más a Gaby. El señor algo cansado solo mencionó que con el semen que tenían que entre ellas tenían que besarte y tocarse para volver a seguirle. Se sentó en su sillón y solo veía como las chicas se besaban entre todas, su esposa solo lo limpiaba con su boca los pocos restos de semen que quedaba en su ya flácido pene. Entró a la casa y volvió a salir para escoger a Gaby y decirle que la quería arriba. Tardaron mucho tiempo hasta que bajaron, se recostó en el sillón y ahora los esposos estaban cogiendo entre ellos. Las chicas solo se tocaban y besaban, parecía que ya había acabado todo…
Cuando tenía de a perrito a su esposa no tardo en decirle que iba a acabar, acercó su pene a su esposa y roció toda su cara de semen, les dijo a las chicas que ahora les tocaba a ellas limpiarla a y así fue una por una besando a aquella señora madura de muy bien cuerpo y guapísima por cierto. El señor tenía para más y jalo a Lizbeth y con su pene todo flácido la puso en cuatro en el sillón y comenzó a introducir sus dedos. Mi pobre amiga se limitaba a decir: “uff” mientras se mordía los labios, Gaby tomó sin permiso el consolador y poco a poco se lo fue introduciendo de modo que termino acostada con él y con las otras chicas tocándola y besándola. Yo en este punto ya quería estallar de placer así que tomé un vaso de plástico y ahí tiré todo el semen después de ver tal excitante escena. Después de terminar solo escuchaba el mete y saca del señor y los quejidos de placer de Lizbeth. Continuó dándole muy fuertes nalgadas que de lejos se veían la marca de su mano hasta que la tomó de aquel cabello rizado y la inclinó para acabar en la boca y parte de sus pechos, las chicas al ver esto se acercaron a ella y comenzaron a limpiarla con sus lenguas de ese líquido y lo mismo pasó con el pene del señor. Ambos dueños de la casa se abrazaron y se besaron para luego decirles que iban a darse un baño y bajando les iban a pagar por el servicio.
Las chicas entraron a un pequeño baño en el jardín y una a una iban entrando para tomar un baño, recogieron sus tangas y vestidos para luego ponérselos. Yo me quedé de lado de mis amigas para evitar cualquier cosa. Baja el matrimonio y el señor comenzó a darle un sobre a cada una de las chicas menos a mí obvio está. Nos dijeron que había estado buena la velada y se despidieron de las chicas, nosotros nos habíamos estacionado frente a la casa así que fuimos los primeros en salir. Yo les decía a mis amigas que eran súper putísimas y que esto jamás lo olvidare gracias a ellas. Solo nos alegramos y nos dirigimos a nuestras casas/departamento para ponerle fin a la noche. En cuanto llegue me quité todo y me masturbe más de 2 veces cortesía de ellas. Fue un muy buen espectáculo.