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Ingrid, la amiga de mi ex
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Tiempo de lectura: 3 minutos

Mi ex-esposa es una persona muy frígida, hacer el amor con ella era sentir que la estaba violando, o como si estuviera cogiéndome a un peluche, del misionero, no salíamos, y después de 3 años de estar con ella, comencé a ansiar nuevas experiencias, veía a las mujeres y tenía fantasías con ellas, un día me dijo que una gran amiga suya venía de otro estado y quería que ella se quedara en casa a dormir, no veía ningún problema y le dije que sí.

Mi ex no es bonita, ni agraciada, parece una albondiguita, gordita, chaparrita, como una garrapatita, sus tetas estaban caídas y no tenía nalgas, mamona y fastidiosa, que mi hermana siempre me preguntaba que hacía con ella, y por qué no la dejaba. El caso es que a los 3 días llego su amiga, una chaparrita hermosa, de cabello negro, lacio y negro, piel tostada, unas bubis que fácil eran talla 40c, su trasero grande y redondo, con una piernas torneadas, vestía un short de mezclilla muy corto que marcaba una pussy de buen tamaño, y una blusa en escote V, sin mangas dejando que sus lolas se vean algo expuestas, me abrazo y me agradeció el dejar que me quedara unos días, mi ex bajo y la miro desaprobatoriamente por su vestimenta sin embargo no le dijo nada, yo subí a dejar las maletas al cuarto de huéspedes, y me quede arriba para darles su espacio. Tome mi teléfono y le mande whats a mi hermana.

Alex: hola onee, vino visita está bien buena.

Grecia: y me lo dices por? Me va a aflojar?

Alex: no creo pero se me paro la verga, si la vieras esta más buena que tu jajaja

Grecia: entonces vas, cógetela, te dejo llego mi machete, y ya sabes cómo me va.

Me quede pensativo e idee algún plan, pero el problema es que mi ex no se iba de la casa, siempre quería estar conmigo, así que resignado baje sin hacer ruido y escuche a Mariela (mi ex) decirle a Íngrid (su amiga) "no espérate, él puede bajar y nos puede ver".

No sé qué sentí entre enojo y excitación pero ella me había mentido, la odie por no decirme la verdad, subí y abrí la puerta haciendo ruido para que se separaran, cuando baje Mariela estaba muy roja y agitada e Íngrid como si nada, en ese momento tome la decisión, sabía lo que iba a hacer, me acerque a Mariela, le di una bofetada y jale a Íngrid para darle un beso húmedo el cual ella correspondió muy a gusto, Mariela se quedó en shock y comenzó a sollozar a lo que más molesto, le di otra bofetada gritándole cállate maldita puta, me saque la verga que estaba con mástil, y se la metí a la boca obligándola a mamarme la verga no me importaron sus lágrimas ni sus arcadas, por su parte Íngrid se acercó a mí y me comenzó a besar de nuevo sacándose la remera y el short, quedando en una tanguita negra dejando un pubis depilado y bronceado, metí mis dedos y estaba húmeda, mientras tanto Mariela me mamaba la verga aún más animada, Íngrid se separó de mí, puso a Mari en 4 e hizo que ella siguiera con la felación, en lo que Íngrid le hacía un oral a ella, la muy puta comenzó a gemir y a mamar mas rápido, no aguante y me vine en su boca, aunque hizo arcadas le obligue a tragárselo, me senté en el sofá, y vi que ellas en el suelo comenzaban con su acto, Mariela se volteo y comenzó a mamarle las tetotas a Íngrid quien dedeaba a Mariela, se comenzaron a besar de forma apasionada y a gemir, Íngrid mordió los pezones de Mariela y esta grito de dolor y placer, se volteó a mí y me dijo “a esta la hare mi perra”, saco de su bolsa varios implementos, le puso unas pinzas para pezón, una para el clítoris, una balita vibradora que se activa con un control remoto, la puso en cuatro, le puso un collar de perra y la ato a la pata de la mesa.

-ahora veras como tu macho me folla y me hace venirme.

Mariela solo asintió con la cabeza, y sus ojos se le llenaron de lágrimas cuando vio que Íngrid se me acerco para lamer mi verga desde las bolas, no le costó mucho trabajo hacer que se pare, nos pusimos en un 69 y probé su rajita húmeda, le metí la lengua, y la saboreé, ella se quitó se montó en mi riata y comenzó a cabalgarme de manera desenfrenada, quería que la nalgueara y así lo hice, la puse en cuatro y se la deje ir ella gritaba y gemía, estábamos sudados pero gozando, Íngrid activo el vibrador de Mariela y se lo dejo ahí, cuando sentí que me venía, fui a la cara de mi ex, y se los deje encima, no sé cuántas veces se vino mi ex, ni cuantas veces me vine yo, pero Íngrid era insaciable y cuando termino tuvo múltiples orgasmos y un squirt que me dejo completamente mojado.

Exhaustos de coger desatamos a Mariela, quien llorando me grito y abofeteo, se fue al baño y ahí se quedó un buen rato, yo lleve a Íngrid al baño y me la cogí una vez más ahí. Nos bañamos y subimos al cuarto, ella me estaba haciendo una felación cuando Mariela entro y nos vio, sus ojitos se volvieron a llenar de lágrimas y salió de la casa llorando, los 3 días que Íngrid estuvo en la casa estuvieron llenos de sexo desenfrenado y rudo, a ella le gustaba que la azotara y así lo hice, 1 semana después llego mi demanda de divorcio que con gusto acepte.

Con Íngrid aun hablamos y nos vemos, pero mi ex no la volví a ver, no sé si le dolió ver a su antigua amante dejarla de lado por mí, o le dolió ver a su esposo dejándola de lado por otra mujer.

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