Cuando me volví independiente compré un departamento el cual estaba junto al de una señora que era mi fantasía cuando era morro.
Comencé a platicar con la señora y nos hicimos muy buenos amigos, tanto que su esposo ya estaba acostumbrado a verme en su casa y a verla a ella en mi casa. Y los dos teníamos llaves del departamento del otro por lo que podíamos entrar a la hora que fuera.
Yo siempre le decía que era una mujer muy hermosa y que cualquier chavo de mi edad quisiera estar con ella y a su vez ella me decía que cualquier señora de su edad quisiera andar conmigo, que ella no porque estaba casada y podría ser hasta mi mamá.
Un día me metí a bañar como a la una de la tarde, lo que no sabía es que ella justamente estaba entrando a mi casa y por error había llegado a la ducha y me estaba viendo como me bañaba. Yo no me di cuenta pero un rato después vi en las cámaras como me había espiado.
Al día siguiente su esposo se había llevado sus hijas a un viaje, por lo que mi vecina estaba sola. Decidí llevarle unas flores pero al entrar en su casa no la encontraba, subí hasta la ducha y vi cómo se estaba bañando.
Me baje el pantalón y comencé a masturbarme sin que ella se diera cuenta, cuando empecé a eyacular decidí desnudarme y meterme a bañar con ella.
Entre la abracé por detrás y comencé a frotar mi pene sobre su culo, ella me estaba confundiendo con su esposo, por lo que yo le dije:
-No soy tu esposo, soy el vecino al que espiaste el otro día mientras se bañaba, ¿Te gusta lo que te estoy haciendo?
Ella entre gemidos dijo:
-Eres Biny, nunca pensé que yo te pudiera gustar, follas muy rico
Continúa…