Un amigo me entregó en bandeja a su esposa (II)
Lucía tenía una sonrisa contagiosa. Cuando soltaba una carcajada, se le formaba un hoyo en su pera y sus pómulos se pronunciaban rozagantes. Estaba contenta y eso me dio mucha confianza. Era la amante perfecta en la situación perfecta. No hizo falta mucho preámbulo porq...