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Me dejé llevar
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Tiempo de lectura: 5 minutos

Era una noche cálida de verano en la que decidí salir con unos amigos de fiesta a bailar un poco, ya que no veía a mi novia desde hacía 2 semanas porque estaba visitando a sus padres que vivían en el extranjero. Llegamos al lugar y ya la fiesta estaba que explotaba; bebida en el suelo y gente besándose por doquier. Me prometí que solo saldría para acompañar a mis amigos quienes estaban solteros y buscaban un rapidito con alguna chica. Es entonces que mi mejor amigo, Raúl, me dice:

-Hey, voy a la barra a ver si hay charla con alguna amiguita, ¿vienes?

-Claro, a ver si puedo tomar unos chupitos que ando seco.

Nos separamos del resto del grupo (que se quedó bailando) y llegamos a la barra. Había algunos asientos libres y decidimos esperar ahí a ver que tal. A mi lado tenía una mujer con un culo que no cabía en el asiento que estaba tomando un gin-tonic junto a su novio. El novio era bastante idiota, a decir verdad. No paraba de alardear que era un jugador de futbol excelente y que teníamos que tratarlo como tal. Entonces dice:

-Amor me voy al baño a descargarme y vamos a la pista

A lo que la novia responde:

-Dale Hernán, pero tomáte tu tiempo, no vaya a ser como la última vez que te hiciste encima por andar apurado

Observé que el hombre (Hernán) era español mientras que ella era argentina. El hecho de que fuera argentina me excitaba un poco, he de decir. Yo solía vivir en Argentina hasta mis 10 años, cuando me mudé a México, y desde ese momento que no veía una mujer argentina, y qué mujer. En ese momento mi acento volvió desde aquella época, y cuando Hernán se fue, le dije:

-¡Por fin una argentina! Desde hace más de una década que no veía una, exceptuando mi mamá

-¡Haay sos argentino! Acá en México vi un par nada más, y eso que llegué desde hace un mes. Me llamo Micaela, pero me dicen Mica

-Hola Mica, soy Julio, pero me suelen decir Juli que queda más fachero jajaja

-¡Me alegra conocerte Juli! ¿Desde hace cuánto vivís acá?

Y comenzó a despegar la charla. Mientras, Raúl se fue a la pista de baile decepcionado porque no pudo hablar con nadie. Pasaron unos 5 minutos de charla y aún Hernán no volvía. Es entonces que Mica me dice:

-Che y, ¿tenes novia o esposa?

-Si tengo, pero desde hace un tiempito que no la veo porque estuvo de viaje viste

-Ahh, ¿y le estás siendo fiel?

-Y, eso intento jajaja, pero se hace complicado porque a mi me gusta la fiesta y la acción

-Ajá, bueno, si te arrepentís siempre estoy yo eh *me dijo mientras miraba hacia el baño*

-Pero vos tenés novio Mica

-¿Quién, Hernán? Naaah Jajaja, ese boludo se puede tomar el palo si quiere, me tiene harto. Se vive mandando cagadas y desde que lo conozco pude llegar al "momento feliz" la enorme cantidad de 0 veces

-¿¡0 veces!? Me compadezco de vos jajaja

-¿Tu novia y vos llegan al "momento" con facilidad?

-Yo tardo un poco pero mi novia, Ema, entre la previa y la acción, llega siempre jajaja

-¿Y no querés intentar conmigo? -me dijo mientras se mordía un poco el labio.

-Ni hablar, yo soy un hombre fiel Mica, aparte me estoy guardando para darle a Ema cuando vuelva, que lo va a necesitar

-Pero ayudame un poquito nomás, hace semanas no tengo momento feliz, no la estarías engañando, sería solo para pasar el rato mientras ella vuelve

A decir verdad, dudé un poco. Se me comenzó a parar algo y cada vez se hacía mas difícil ignorar sus tetas, como si me estuvieran mirando. Hacía muchos días que no acababa y yo estaba necesitando descargar lo acumulado. Mientras pensaba, me dice:

-No me gusta ser muy atrevida pero… Se nota que se te está formando el bulto, ¿estás dudando no?

Me reí algo nervioso y le dije:

-Si jajaja, es que hace mucho que no acabo porque yo no me la hago sin Ema. Pero no es que esté dudando, es normal porque te vi un poco las tetas

-Ah, ¿estas? -agarra mi mano y la coloca en su teta.

-Heey pará, de verdad te digo, no quiero quilombos con Hernán

-Bueno, entonces vení

Micaela comienza a caminar hacia la salida sola, mientras me debatía entre seguirla o no. Finalmente, me convencí de que esto no era engañar a Ema, y fui con ella. Salimos del lugar y le digo:

-Vení, tengo acá mi auto

-Mmm, encima con auto, jajaja

Nos subimos al auto y me pongo a manejar rumbo a un motel para pasar la noche, ya que no quería hacerlo en mi casa por si Ema llegaba de sorpresa. Es entonces que suena su celular, era Hernán. Ella rechaza la llamada y apaga el celular. Inmediatamente, se saca la chaqueta de cuero (que le llegaba hasta la cintura) y me dice:

-Uff que calor, pero no prendas el aire, así me encanta

Y entonces se me paró aún más, ese comentario me destruyó por dentro. Llegamos al Motel y le dije:

-Perdón, ¿Podrías reservar vos? Tomá la plata, mientras yo estaciono el auto

-Dale, te espero afuera de recepción, ni se te ocurra huir eh *se baja mientras se le levanta un poco la pollera y agarra su chaqueta*

-No jaja, ya llegué hasta acá, no hay marcha atrás

Estaciono el auto y me dirijo a recepción, ella estaba afuera. Me mostró la llave con el número 6 mientras me señala que haga silencio con el dedo. Entramos a la habitación, y lo primero que hice fue dirigirme al baño para buscar condones. Pero no encontré. Salgo del baño para decírselo y me agarra desde la esquina y me comienza a besar. Le agarro el culo con mis dos manos para luego bajar hasta el muslo y levantarla del suelo. Ella entendió y rodeo sus piernas alrededor de mi cuerpo. La llevo hasta la cama y la suelto.

Comienzo a sacarme el short deportivo mientras ella se desnuda al completo exceptuando las medias y su corpiño. Entonces se recoge el pelo y me baja el bóxer, para comenzar a chuparme la pija. Lo hacía tan ruidoso que lo volvía aún más excitante, a la par que me acariciaba el pecho. Se saca mi pija de la boca para decirme:

-Es una bestia esto, menos mal que te convencí para que vengas. Encima mirá como tenes los huevos, es verdad que hace un montón no acabas.

-Si, de eso te quería hablar, en el baño no había condones así que hagámoslo oral nada más -le dije mientras esperaba que dijera que no había problema.

-En mis planes iniciales ya no había condón, Juli. Quiero toda esa leche acumulada para mi, al pedo tirarla en un condón

Eso me excito aún mas, lo que hizo que le agarrara las manos y se las llevara por su espalda. La acuesto en la almohada y le comienzo a chupar la concha. Madre mía, que concha. Sentía que estaba en un todo terreno conduciendo a través de una meseta, fue increíble. Primero le introduzco un dedo acompañado de una chupada de clítoris para caldear el ambiente, y así estoy un buen rato. Luego, cuando menos se lo esperaba, paro repentinamente unos segundos. Antes de que pudiera preguntarme que pasó, le introduzco 3 dedos de golpe acompañado de una fuerte chupada, a lo que largó un fuerte gemido

-Dios sos un hijo de puta, lo hacés re bien, dale seguí así no pares

Continué cada vez mas rápido hasta que se comenzó a agitar y finalmente acabó. Mientras aún se recuperaba, agarre mi verga que estaba por explotar, y comencé a penetrarla. Mientras lo hacía, le agarré las dos tetas enormes y le retorcí los pezones.

-Aaay dios me encanta no lo dejes de hacer, dame todo lo que tenés la concha de tu madre

Sus insultos me excitaron aún mas, pero ya me estaba cansando, por lo que me acosté a su lado, la levanté desde la espalda y, entendiendo mi pedido, comenzó a cabalgarme. Se notaba que quería mi verga pues no paraba de saltar mientras gemía mas y más fuerte. Cada vez aumentaba mas el ritmo mientras los golpes de su pelvis con la mía sonaba mas y más fuerte. Llegó un momento que no pudo aumentar mas la velocidad, por lo que, aprovechando que era más alta que yo, se saco mi verga de adentro suyo, se acostó encima mío boca abajo apoyando sus tetas contra mi pecho, y mientras se volvía a colocar mi verga en su concha me susurró al oído:

-Sería una pena que acabes ahora, porque voy a pegarte la mayor cogida de tu vida

Y comenzó a cogerme a una velocidad que jamás había visto. Su cadera estaba realmente muy entrenada, y su culo igual. Viendo semejante movimiento comencé a besarla mientras agarraba su culo para notar el movimiento. Luego de unos segundos le dije:

-Estoy por acabar, salite así te acabo en la boca

-¿Quien habló de bocas? -dijo mientras apartó su cara de la mía y me miró traviesamente.

Aumentó aún más la velocidad y se agarró fuertemente a mí para que no pueda salir. Le dije que era peligroso acabar dentro pero no escuchó, y la verdad, yo también quería. Comencé a gemir y entonces lo solté todo. Sentí como bañaba mi propia verga de mi leche y como todos sus recovecos se impregnaban de mi leche. Disminuyó rápidamente el ritmo pero no se sacó la verga de adentro suyo. Nos besamos un tiempo y luego se salió de la pose. Comenzó a gotear su concha de semen, y me dijo

-Mirá todo lo que acabaste hijo de mil, jamás vi semejante lecheada. Lo mejor de todo es que seguro tenés mas, y te lo voy a sacar, pero pará que llamo a una amiga.

Continuará…

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