Todo esto sucedió hace 7 meses. Mi abuela estaba muy enferma y estaba en el hospital. Es por eso que su hermana, y tía de mi padre, Norma, se estaba quedando en nuestra casa ya que ella vive en un pueblo a 3 horas de la ciudad. Mi tía abuela Norma es una vieja de 68 años, gorda, con el cabello rubio (teñido). Pequeña, 1.55 cm de estatura. Culo y panza enormes. Sus tetas también son enormes, aunque muy caídas. Ella está casada hace 40 años con su marido, un anciano cascarrabias. La verdad nunca le había prestado atención, ya que siempre la vi como la anciana hermana de mi anciana abuela.
Por mi parte, soy un chico atlético. Me llamo Javi, tengo 21 años y un apetito sexual voraz, como cualquier chico de mi edad. Alto 1.79 m, ojos y pelo negro, y de rostro bastante normal, por eso desde mis 17 años que voy al gym, y mi cuerpo está fuertemente tonificado, abdominales, pectorales y bíceps bien formados. Siempre supe que al no poseer belleza física entonces debía enfocarme en mi cuerpo para atraer a las chicas.
Una noche estábamos todos en el hospital ya que mi abuela se encontraba ya muy mal, y mis padres decidieron quedarse esa noche ahí, ya que podrían haber malas noticias en cualquier momento. Me pidieron que regrese a casa con el auto familiar y lleve conmigo a mi tía abuela Norma. Acepto, y nos vamos. Estaba lloviendo mucho esa noche y era ya muy tarde. Durante el viaje, Norma no paraba de hablarme. Yo solo decía que si a todo lo que ella comentaba, no me interesaba hablarle. Lo que si note es que tocaba mi pierna, pero al ir yo conduciendo la verdad es que no podía prestarle atención. Al llegar a casa, y al intentar aparcar el auto en el garaje, una mala maniobra hace que raye todo el auto del lado del conductor. Desesperado me bajo y bajo la intensa lluvia me pongo muy nervioso al ver que he rayado todo el auto de mi padre. Me desesperé tanto que ya podía imaginar su enojo, sus gritos y el no darme más dinero como castigo.
En ese momento de desesperación, pasé como 5 minutos bajo la lluvia, por lo que quedé empapado. Norma se baja del coche e intenta meterme dentro de la casa:
– Javi vamos dentro de la casa, estas empapado!
– No, déjame. No sé qué voy a hacer!!!
– Javi por favor vamos dentro. Encontraremos una solución.
Accedo y entramos a la casa empapados. Yo me encuentro muy nervioso, mientras Norma trae unas toallas para secarnos. En ese momento, yo estaba en un estado de histeria, por lo que no prestaba mucha atención a lo que Norma hacía.
– Ay Javi! Cuando tu padre se entere te matará!
– Ya lo sé!! No sé qué hacer tía!!! No me dará más dinero
– Lo primero es tratar de secarte porque si no te enfermarás!
Mientras decía eso, comenzó a desabotonar mi camisa toda mojada. Finalmente me quitó la camisa, y comenzó a secar todo mi musculoso cuerpo. Por momentos podía sentir como utilizaba sus manos para secarme, en lugar de la toalla. Podía sentir sus viejas manos tocando mis pectorales y mis abdominales. Pero mi estado era todavía de nerviosismo por lo que solo podía pensar en solucionar el problema del auto.
– Javi deberías tomar una ducha caliente para calmarte y para evitar enfermarte
– No!! Primero debo pensar como solucionar esto!!
– Javi, por favor escúchame. Déjame que te ayudo a quitarte el pantalón así puedes tomarte una ducha caliente.
– Nonono, gracias. Yo puedo hacerlo solo
Le dije mientras me alejaba, notando su cara de preocupación. Tomé de sus manos mi camisa, que ella aun sostenía fuertemente.
– Iré a tomar una ducha y pensar que le diré a mi padre.
– Eso es lo mejor Javi. Ve y yo te buscaré ropa seca, no te preocupes. Encontraremos una solución.
Fui al baño, me desvestí y estuve en la tina aproximadamente 40 minutos. Al salir, voy camino a mi habitación para cambiarme y ponerme ropa seca, ya que estaba desnudo, solo me había atado una toalla a la cintura. Antes de llegar a mi cuarto, me sorprende mi tía abuela…
– Javi, aquí te conseguí ropa seca para que te pongas.
– Gracias tía, no debías. Me cambiaré rápido ya que sigo desnudo. Qué pena me veas así.
– Ay Javi, ninguna pena!! Sabes lo que es para una vieja como yo poder ver a un chico como tú? Es como mi regalo de Navidad
Sonrío y tomo la ropa que mi tía abuela me había conseguido, y le digo:
– Bueno, gracias. Me voy a mi habitación a cambiarme.
Y emprendo mi camino hacia mi cuarto. Cierro la Puerta, pongo la ropa sobre mi cama, y escucho golpes en mi Puerta.
– Si???
– Javi, discúlpame, ya te has cambiado? Necesito hablar contigo solo 2 minutos.
– Puedes entrar… Que pasa?
En ese momento, entra ella como muy temerosa. Yo me siento en mi cama, solo con mi toalla cubriendo mi desnudez y la miro esperando a ver que es lo que me quería decir…
– Javi estuve pensando en que podemos decirle a tu padre acerca del coche.
– Tía, le diré la verdad y que me castigue sin darme dinero… lamentablemente no tengo otra opción.
– Espera Javi, yo quiero proponerte algo. Diré que yo fui la que conducía el coche, que tú no te sentías bien y yo te obligué a que me dejes conducir y que fui yo la que rayó el auto… no me dirán nada. Ofreceré pagar los daños.
– Nooo Tía, como harás eso! estás loca???!!
– Javi, lo hare! No dejaré que te castiguen.
En ese momento me levanto de mi cama, y voy hacia ella. Abro mis brazos y la abrazo fuertemente agradeciéndole. Todo mi musculoso y desnudo cuerpo abrazando su vejez.
– Muchas gracias tía!!! Te debo una grande
– Bueno Javi, yo en realidad quería pedirte algo a cambio.
– Claro que si tía!!!! Lo que necesites por favor dímelo.
Dije yo con completa Inocencia. En ese momento, ella se aleja unos centímetros de mí, y mirando hacia mi torso desnudo, pone su mano sobre mi pecho. La miro como desconcertado, ella no me miraba a la cara, solo miraba mis músculos mientras su mano suavemente comienza a bajar desde mi pecho hacia mi ombligo, suavemente acariciando mis abdominales.
– Hace mucho tiempo que yo… Bueno. Tú sabes que mi marido es un cascarrabias, no nos divorciamos por el que dirán. Pero hace más de 15 años que no me siento mujer.
– Y esto que tiene que ver tía?
– Al quitarte la camisa hoy mientras intentaba secarte, y ver el hombre en el que te has convertido, ha despertado en mi un deseo muy fuerte.
– Tía de verdad no sé qué está pasando…
– Javi, yo estoy dispuesta a mentir a tu padre, pagar el daño del coche… a cambio de que tú me des una… una… una buena follada.
En ese momento me echo para atrás, y vuelvo a sentarme en mi cama. Agobiado, no sabiendo que hacer, ni que pensar. La miro como desconcertado, y ella se queda parada mirándome, y mientras se cruza de brazos me dice:
– Javi, es tu decisión. No tienes otra salida, o te enfrentas a tu padre o cumples conmigo, y yo me encargo de todo. Lo único… no tienes mucho tiempo. Tu padre llegará en la mañana y verá el coche, por lo que solo tienes esta noche para tomar la decisión.
Dentro de mi cabeza solo pensaba en que la maldita anciana tenía el plan perfecto. Así como ella lo había dicho, estaba atrapado en su perverso plan. No quería follármela, pero me daba pánico no tener mi dinero para salir de fiesta con mis amigos e invitar tragos a chicas realmente hermosas. Luego de pensar esto por 2 minutos, finalmente cedí ante el morboso plan de mi tía abuela. Y mirándola fijamente a la cara con todo mi enojo y resignación, me quito la toalla de la cintura y le digo:
– Bueno, creo que te vas a salir con la tuya vieja morbosa. Ven y cómetelo.
En ese momento ella suelta una sonrisa, y se acerca casi corriendo hacia mí. Yo aún sentado en mi cama, pero sin la toalla, dejaba al descubierto mi polla peluda y flácida. Ella se arrodilla y casi sin respirar se lo mete en la boca. En ese momento, yo echo mi cabeza para atrás y cierro los ojos para imaginarme que es alguna tía buenorra la que me está chupando la polla y no mi anciana tía abuela. Ese plan funciona, ya que al tener los ojos cerrados imaginándome otras mujeres, y con lo ahogada que estaba Norma con mi polla, ésta se empezó a poner durísima. Ya que vaya, soy hombre y no soy de piedra, tener una boca mamándote la polla, pone duro a cualquiera. Le digo:
– Estás disfrutándolo verdad?
– Javi, que rica polla tienes. La última vez que me comí algo así de grande y duro fue hace más de 40 años!
– Cométela y cállate, vieja morbosa. Mira como te estas cobrando el favor, estas ahogada en mi polla.
En ese momento ella se detiene, se pone de pie, y entonces yo abro mis ojos para ver que hacía. La vieja empieza a quitarse la ropa, comienzo a ver su desnudo y anciano cuerpo. Sus tetas eran enormes, sus piernas y su culo también. Tenía el coño súper peludo. En ese momento vuelvo a cerrar los ojos, ella me toma la mano y hace que me pare. Una vez de pie, sigue chupándome la polla como una puta. Yo comienzo a tomarle la cabeza y empiezo a bombardearle la boca. Ya estaba súper cachondo. Ella se ahogaba y casi vomita en varios momentos. Se detiene y mientras sigue arrodillada, y con los ojos llorosos mirándome desde el piso me dice:
– Ahora quiero que me folles Javi
– Si, ya lo sé qué quieres que te folle. Acuéstate en mi cama, así te demuestro lo que soy y ya terminamos con esto.
Ella se acuesta en mi cama y abre las piernas como una completa puta. Yo me monto encima de ella, me pongo un poco de saliva en la polla, que igualmente ya estaba súper mojada de la saliva de la puta de Norma. Me monto encima, y agarrándome la polla empiezo a apoyarla en su coño mega peludo. Ella empieza a gemir. Teniendo la delicadeza de no lastimarla, empiezo a metérsela suavemente, estaba mojada la vieja zorra. Sigo metiéndosela, mientras ella sigue gimiendo hasta sentir que toda mi polla está enterrada en su viejo coño. En ese momento empiezo a follarmela cada vez mas y mas duro. Ella comienza a tomar mi culo mientras yo me la follo duro y grita como una puta veinteañera. En ese momento, empieza a buscar mi boca para besarme, me resisto. En un momento ya no pude resistir más, y pensé que como no podía salir de esa situación, lo único que podía hacer es dejarme llevar y disfrutar y eso hice. Nos comenzamos a besar apasionadamente, toda su lengua estaba dentro de mi boca mientras la mía jugaba con la suya.
– Javi me estas destrozandoo!!!
– Esto era lo que querías, cóbrate todo! ufff Toma, tomaaa
– Aaaahhh
– Toma… toma, ufff
– Aaaahhh
Empecé a disfrutar muchísimo. Mis ojos se daban vuelta del placer mientras toda mi polla estaba dentro de su coño. Follamos casi 40 minutos hasta que finalmente exploté dentro de ella. Todo mi semen dentro de su viejo coño. Terminamos todos sudados, luego de correrme dejé mi polla dentro de ella por unos minutos hasta que finalmente la saqué y me acosté a su lado. Ella tenía sus ojos cerrados y una sonrisa enorme…
– Bueno, imagino ya estarás contenta… – Le dije con mis brazos detrás de mi cabeza
– Javi, pensar que te conocí cuando eras un niño y hoy me has demostrado que eres todo un hombre!!! Que riquísima follada me haz pegado, gracias gracias graciaaas… – Me decía mientras intentaba recuperar la respiración y acariciaba mi pecho.
– Claro que te piensas? Que sigo siendo un niño? Claro que soy un hombre y espero te haya quedado muy en claro. Tu plan te resultó y obtuviste lo que querías… – Le quito sus manos de mi pecho
– Tu también, o acaso me vas a negar que no lo disfrutaste? Te corriste muchísimo
– Mira Norma, no quiero hablar de eso. Yo ya he cumplido con mi parte del trato, ya te di la follada que querías y te la disfrutaste. Ahora por favor mañana cumple con tu parte.
Ella cumplió con su parte del trato, se culpó y pagó la rayadura. Finalmente mi abuela murió 4 días después. Tras el funeral, mi tía abuela Norma volvió a su pueblo. No la he vuelto a ver hasta ahora, pero jamás olvidaré que su morbosa mente me puso al límite de mi sexualidad, y disfruté tanto follarmela, que estoy pensando volver a follarme alguna anciana pronto. Si eso sucede, se los contaré.