Buenas tardes, en esta ocasión mi relato será como espectador de mi novia, otra vez, pero esta vez me dejó sorprendido su lujuria:
Cierta tarde recibo una llamada de mi novia Yola pidiéndome que fuera a su casa, a la cual me dirigí inmediatamente y al llegar me recibe efusivamente como siempre, llenándome de besos y permitiéndome acariciar sus nalgas y sus senos, a plena luz del día y en la calle lo cual nunca hacíamos para evitar murmuraciones de sus vecinos. Después de su efusiva bienvenida me pide que la lleve con el mecánico hacia donde nos dirigimos inmediatamente, y en el trayecto como de costumbre no dejaba de acariciar sus senos y meterle la mano en la entrepierna. Al llegar me pide que espere en el carro y ella se dirija al taller. Pasaron los minutos y yo escuchaba música no me percaté del paso del tiempo y que empezaba a oscurecer, fue cuando noté que habían pasado Dos horas, empecé a llamar por teléfono a mi novia y no contestaba, llamada tras llamada y nada, decidí bajarme a buscarla.
Al llegar al taller la puerta estaba semi abierta y no se escuchaba a nadie por lo que decidí entrar llamando a Yola, pero nada, seguí buscando y al pasar junto a una pequeña bodega escuche ruidos extraños y al asomarme por la ventana quede en shock, mi novia estaba teniendo relaciones sexuales con el mecánico, se veía que lo estaba disfrutando en grande, a través de la ventana veía cómo cabalgaba la verga de ese hombre y ponía los ojos en blanco, estaba en éxtasis. Le estaban estrujando los senos y gemía como desesperada, lejos de molestarme me gustaba, me excitaba ver a mi novia disfrutar del sexo, y me empecé a empalmar. Me saque la verga del pantalón y me empecé a masturbar viendo aquella escena que me tenía a 100. La tenían en cuatro y le estaban clavando ese mástil en ella, y le metían toda la mano en el culo haciendo que gimiera como poseída, una auténtica puta lo cual al mismo tiempo me sorprendía y me excitaba.
Estallo unas 6 veces, y le dejaron el coño y la cola llena de semen. Después de un tiempo que se quedaron abrazados, Yola dijo que ya se retiraba para que yo no fuera a sospechar. Aprovechando mientras se cambiaban salí con sumo cuidado del taller y me subí al carro donde la esperé. Cuando subió al carro me dijo que había tardado porque estaba hablando y consolando a la esposa del mecánico que había sufrido una tragedia. Ese día me quede a dormir con ella, no sin antes haberse dado una ducha, e hicimos el amor como locos procediendo yo por primera vez y sin pedir permiso, a hacerle sexo anal!!